PARTIDO REVOLUCIONARIO DEMOCRÁTICO
COMUNICADO AL PAÍS
“El orden internacional está esencialmente constituido por el respeto a la personalidad, soberanía e independencia de los Estados y por el fiel cumplimiento de las obligaciones emanadas de los tratados y de otras fuentes del derecho internacional” (Carta de la Organización de los Estados Americanos)
El Partido Revolucionario Democrático (PRD) considerando que durante 2016, Panamá ha sido señalada y acusada por una serie de eventos que atentan contra empresas y ciudadanos de este país, afectando nuestra imagen y soberanía, expresa la siguiente posición:
Observamos con indignación que la Oficina de Control de Activos en el Extranjero del Departamento del Tesoro de Estados Unidos (OFAC por sus siglas en inglés) incluya en la llamada Lista Clinton a grupos empresariales panameños sin que medie evidencia alguna.
Se acusa a estos grupos de estar involucrados en lavado de dinero, pero desde el pasado cinco de mayo cuando se hizo el anuncio, ninguna entidad oficial norteamericana ha presentado, ni en Panamá ni en Estados Unidos, una sola prueba que corrobore la existencia del hecho punible.
El pasado 15 de noviembre el Ministerio Público de Panamá concluyó que “los medios de justificación acumulados no son suficientes para comprobar el o los hechos punibles investigados”, en tanto que con anterioridad la Fiscalía General de la hermana república de Colombia consignó la no existencia de pruebas contra los grupos en cuestión, después de siete largos años de investigación.
La medida norteamericana ha forzado la venta de activos bajo el criterio de que “el futuro de esas empresas depende de su dueño”, tal cual lo ha dicho de manera injerente el señor John Feely, embajador de Estados Unidos en Panamá. Esta situación ha violentado los derechos humanos de miles de panameños, tras provocar su desestabilización laboral; afectando la libertad de expresión y atentado contra nuestro patrimonio histórico.
Nada de ello es coherente con los valores morales y la larga tradición de respeto al Derecho y a la Democracia, que Estados Unidos preconiza ante el mundo.
Para el PRD se trata de una flagrante violación al Derecho Internacional, al debido proceso, y de una medida administrativa unilateral de extraterritorialidad mediante la cual Estados Unidos viola nuestra soberanía y atenta contra los intereses legítimos de nuestro ordenamiento jurídico.
Estados Unidos ha puesto en juego la sobrevivencia de dos importantes diarios de la localidad: El Siglo y La Estrella de Panamá, que representan una importante cuota en el equilibrio de la opinión pública panameña, portadores significativos de la libertad de expresión.
Es inadmisible que esos periódicos estén condenados a desaparecer el próximo mes de enero, afectando un importante factor en el pluralismo y la independencia de la opinión pública de Panamá.
En medio de esta situación, el PRD lamenta profundamente, no solo el estado de indefensión en que han quedado estas empresas, sino la complicidad oficial con una medida carente de pruebas, en lo que puede constituir un mensaje amargo y frustrante para el empresariado nacional, porque sin haberle exigido a Estados Unidos las evidencias que demuestren el delito, nuestras autoridades parecen dar por sentada la veracidad de la acusación.
El PRD demanda que el Estado panameño asuma la defensa de sus ciudadanos con una posición enérgica y digna, le exija a ese país que cese esta agresión contra las empresas panameñas, y que se excluya de manera inmediata a los diarios La Estrella de Panamá y El Siglo de la llamada Lista Clinton.
Para el PRD está en juego el respeto que merece Panamá, porque si no encaramos estos hechos como Nación, a futuro ningún ciudadano ni ninguna empresa estará a salvo de este tipo de transgresiones.
Resulta inaceptable que el gobierno asuma una posición complaciente ante estos hechos y que acoja la posición del embajador Feely de vender estas empresas, mientras la aprehensión y el miedo se apoderan de empresarios nacionales porque no encuentran respaldo en quien, por mandato constitucional, debe ser garantía de sus esfuerzos.
El PRD advierte que desde principios de este año, Panamá ha sido señalada como paraíso fiscal en lo que bien puede considerarse como una agresión a nuestra economía, lo cual está generando una merma al crecimiento económico del país.
En ese escenario figuran negocios que son considerados ilegales cuando se ejercen fuera de los territorios de los países que nos han señalado, pero que gozan de todas las ventajas cuando son sus nacionales quienes los desarrollan.
El Partido Revolucionario Democrático se adhiere a todas las organizaciones y gremios del país que se han pronunciado sobre estos aspectos, con el propósito de impedir que se violenten los derechos de la Nación. Si no hay autoridad que asuma una posición digna, entonces a los ciudadanos nos asiste reclamar la valía de nuestros derechos y valores; la sociedad civil, los gremios empresariales, los sindicatos, los partidos políticos y las organizaciones populares debemos asumir ese rol.
A Panamá le tomó casi un siglo consolidar su independencia y hacer efectiva su soberanía, para ejercerla mediante un régimen democrático y jurídico que beneficiara a todos sus ciudadanos y a todos aquellos que residen en su territorio.
Los panameños hemos empeñado grandes esfuerzos en esa dirección, hasta convertirnos en uno de los países de mayor crecimiento en la región; con enormes desafíos y metas por cumplir pero admirados y reconocidos en el concierto de las naciones por la forma como despuntamos en este siglo, por la manera respetuosa como concebimos las relaciones internacionales y por la decisión de apuntalarlas.
Nada debe afectar ese camino, nada debe enturbiar nuestra decisión y deseos de perfeccionar la Democracia; de hacer más transparente la gestión, pero sobre todo más independiente a nuestro país, exigiendo el respeto que merece, sin que sea vulnerada nuestra dignidad como Nación.
Ciudad de Panamá, 12 de diciembre de 2016.
COMITÉ EJECUTIVO NACIONAL